18 de marzo
Me levante temprano, me bañe, me peine, em... bueno en realidad no me peine, me tome el colectivo y fui al Rojas. Todo esto a las 8 de la mañana.
Cuando llegué había mucha gente totalmente desorganizada con una cara de "qué hago?, tírenme un centro", por suerte a los primeros que llamaron fue a los alumnos de Matemática.
El jefe de la carrera, el Prof. Gustavo Diaz entro al aula que nos fue designada y nos explico dos cosas.
La primera: que no íbamos a empezar ese día, sino el 8 de abril debido a que por los feriados muchas mesas de exámenes tuvieron que retrasarse.
La segunda: La cantidad de inscritos a la mañana fueron 150 y a la tarde 38, por ende a la mañana no se puede enseñar porque no hay aulas para esa cantidad de alumnos y a la tarde tampoco porque no pueden abrir un curso por tan poca cantidad.
Debido a esta problemática nos pidió que a aquellos que no les ocasionaba ningún problema cambiarse de turno se anotaran en una hoja que fue pasando de banco en banco para poder hacer el cambio.
La hoja solamente tuvo 12 nombres, por lo cual quedarían 50 a la tarde, y 138 a la mañana.
Todo esto contando otros factores, como ser que hay una cantidad de recursantes que aumentaría el numero de alumnos tanto en el turno mañana como en el turno tarde, y ademas la cantidad de personas que se inscribieron y por algún motivo no van a cursar, lo que reduciría el número de personas. Sin ir mas lejos, en el aula no había 150 personas...
Si este inconveniente no se logra disipar antes del 8 de abril la solución seria un sorteo donde cada estudiante será representado por un número y se sorteará. El número que salga sorteado será el primero en pasar al turno tarde, y a partir de ese numero en adelante pasaran todos los alumnos que sean necesarios para equiparar ambos turnos.
Es decir: Si sale sorteado el 40, el que tenga el numero 40 pasa al turno tarde, le sigue el 41, el 42 y así hasta que se logre equiparar.
La idea de hacer el sorteo fue pensada a partir de que no se puede estudiar cada caso en particular y establecer un orden de prioridad en problemas que tienen los estudiantes por los cuales no pueden cambiarse de turno, estos serían por cuestiones de trabajo, problemas personales o personas a cargo.
Cuando se habló del sorteo muchos tuvieron ganas de descartar del turno mañana al alumno que estaba ausente, sin embargo esa idea fue descartada en carácter de injusta, porque ese día fue un feriado y más allá de eso el hecho que un alumno se halla ausentado un día en particular no significa que no tenga interés, hay un abanico de situaciones que pudieron ocurrir para justificar la ausencia del estudiante. Pero bueno muchos estábamos con esas ganas de "hachar" al ausente, aunque reflexionando... lo más justo es el sorteo, y de todas maneras no hay otra opción.
El profesor dejo una dirección de mail para aquellos que pudieran organizarse y cambiarse de turno, se los dejo acá para que puedan tomar nota.
gdiazciaa@yahoo.com
La cuestión es.... el 8 allí estaré cruzando los dedos para conservar el turno!.
Marta :)
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